FELICIDADES BARÇA

Ya está, lo han hecho, la Liga, la Copa, Campeones de Europa. Tienen el mejor equipo de España y de Europa. Barcelona se echó a la calle para celebrarlo y en otros muchos lugares de España los aficionados hicieron lo propio. Telemadrid abre su diario de la noche con la querella contra Garzón, con los aviones que utiliza Zapatero para desplazarse por España. Con la situación de la Gripe A en el cuartel de Hoyo de Manzanares y las Ministras de Defensa y Sanidad, las ayudas de la Junta de Andalucía a una empresa donde trabaja una hija del ex-Presidente andaluz y las redadas de inmigrantes.

El Barça sólo es mencionado al hablar de las portadas de los periódicos porque no queda más remedio. España genera muchas noticias al día, pero Telemadrid a lo suyo, como si el Barça fuera un equipo de otro país. Una vez más Madrid no es la capital de España, ni en la Puerta del Sol rompen las olas de las Españas.

Es absurdo que haya quienes por acción u omisión convierten el deporte en instrumento para obtener réditos políticos, y peor aún en arma al servicio de intereses partidistas, ya sean del partidismo nacionalista catalán o del aún más rancio nacionalismo españolista.

En un mundo globalizado. En una Europa unida en lo económico, errática en lo político, desequilibrada en lo social. En una España golpeada por la crisis, golpeada en profundidad en su modelo económico, herida en su cohesión social por las fracturas generadas por la precariedad laboral y los efectos de un paro galopante, el problema de los trabajadores no es dónde situamos pasos fronterizos, porque un trabajador portugués, francés, ucraniano o marroquí, forma más parte de nuestra patria que Gerardo Díaz Ferrán o cualquiera de los Presidentes y altos ejecutivos, de las grandes empresas y corporaciones financieras. Lo siento, pero así son las cosas.

Mis problemas y mi vida tienen más que ver con los de cualquier trabajador del mundo que con los contratos blindados, las altas retribuciones, las exageradas primas y las ingentes indemnizaciones de esos magos de las finanzas. Ni con sus vacaciones, sus viviendas, sus coches, ni sus paraísos fiscales. Probablemente, en conjunto, paguen hasta menos impuestos que yo. Así son las cosas.

El Barça es el equipo por excelencia de Cataluña, aunque hay otros. El Real Madrid es el equipo por excelencia de la capital, aunque no conviene olvidar al Atleti, el Rayo o el Getafe.

Un partido entre el Madrid y el Barça, o entre el Madrid y el Atleti suscitan pasiones. Consentir que esa pasión desemboque en violencia entre aficionados o en fracturas políticas, es absolutamente irresponsable. Fomentar esa irresponsabilidad es absolutamente suicida.

España sólo es viable si encontramos formulas voluntarias de entendimiento entre el centro y la periferia. Cataluña es el motor industrial de España. Euskadi, Andalucía o Valencia son comunidades tremendamente dinámicas. Madrid es la capital administrativa, polo de servicios, sedes centrales y puerta de entrada de las inversiones extranjeras. Debería ser foro de encuentro de todas las España. Si Barcelona y Madrid se entienden todos los demás descansan y se siente seguros. Si además fuésemos capaces de entendernos bien con Lisboa, esta península ancestral, volvería a ser plaza inevitable de encuentro, de Iberoamérica, África, Europa, el Mediterráneo y Oriente Medio.

Así que, por el bien de todos, con afecto y sinceridad, Visca el Barça y felicidades a todos sus seguidores en Cataluña, en Madrid y en toda España.

Francisco Javier López Martín
Secretario General CCOO de Madrid