Ya sé que el panorama político se ha complicado mucho y que las urgencias políticas se han desencadenado en las sedes de los partidos. Las elecciones en Madrid forman parte de esas urgencias que ha decretado nuestra caprichosa presidenta para evitar cualquier otro debate que no gire en torno a su persona en toda España.
Sin embargo, mientras ella se ocupa de sus urgencias, alguien tiene que seguir gobernado, atendiendo a lo necesario y otros muchos tenemos que seguir pensando en lo importante. Los cambios en todos los campos están siendo tan brutales que nadie puede entender que haya responsables políticos que juegan a su propio interés, a saciar sus ansias de poder, a llenar los bolsillos de sus socios económicos.
La pandemia ha obligado a afrontar transformaciones inesperadas en nuestras maneras de vivir lo cotidiano, nuestras relaciones personales, nuestras formas de trabajo y también en cómo afrontamos los procesos educativos. Muchos de estos cambios son temporales, otros, sin embargo, han llegado para quedarse y algunos han sido tan forzados, que desaparecerán en cuanto que las vacunas hayan hecho aparición en número suficiente.
Lo he podido comprobar en el campo de la educación, donde, junto a los convencidos de la necesidad de los cambios, los apóstoles de las nuevas tecnologías, abundan aquellos que entienden que la educación requiere presencialidad, sin la cual no existe verdadera educación. Opiniones que he podido escuchar tanto en el profesorado, como en el alumnado.
Lee el resto de esta entrada »