Víctimas del coronavirus

agosto 29, 2020

Vivimos en sociedad porque nos necesitamos unos a otros, juntos por egoísmo y por solidaridad, que ambas cosas forman parte del primigenio espíritu de la especie, queremos lo mejor para nosotros mismos y para los nuestros más cercanos, pero sabemos que esto será imposible en guerra abierta con el resto  de nuestros vecinos, lo mejor para nosotros y para los nuestros es que aprendamos a cooperar con los demás.

Somos tribu, barrio, pueblo, ciudad, nación, país, raza, especie, egoístas por naturaleza, solidarios por necesidad. De ahí que la calidad de vida de una sociedad humana se mida en términos de la capacidad para proteger y defender a las personas más débiles.

El momento confinamiento general ante el embate del coronavirus parece haber pasado. Comienzan a medirse los impactos sobre la ciudadanía de las medidas que se fueron adoptando. Parece existir coincidencia en que el aislamiento físico, el cierre de centros de trabajo, el confinamiento en los domicilios y en instituciones como las residencias de personas mayores, el cierre de escuelas, ha tenido un efecto psicológico muy duro sobre toda la población, pero muy especialmente sobre las mujeres, los niños, las personas mayores. Lee el resto de esta entrada »


El país que necesitamos

agosto 29, 2020

Recientemente, aunque esto de recientemente comienza a ser muy relativo porque unos pocos meses parecen años hoy en día, conocimos que el PIB español había retrocedido en el último trimestre en un 18´5%, una caída muy superior a la de Francia, que fue de un 13´4%, a la de Alemania, que retrocedió un 10´1%, e incluso  superior a la de otros países similares a nosotros, como Italia, con un retroceso del 13´8%, o nuestro vecino Portugal, con un 14´1%. Hasta la media europea nos queda muy lejos, con un 12´7 de caída.

Inmediatamente los agoreros, especializados en remover la carroña, han culpado al gobierno de la situación, por una mala gestión de la crisis. Menos mal que nadie se acuerda de nada al poco de producirse cualquier noticia, porque de lo contrario estas aves de mal agüero se verían obligadas a explicar sus posiciones siempre negativas, siempre condenatorias, siempre calumniosas, al día siguiente de haberlas aireado públicamente.

No sería para menos, cuando hemos podido comprobar que, a los pocos días de conocer la mala noticia sobre la economía española, hemos podido comprobar que el retroceso de la economía del Reino Unido ha resultado ser aún mayor que la de nuestro país, un 20´4% en el último trimestre. Lee el resto de esta entrada »


Formación de aprendices adultos en tiempos de pandemia

agosto 29, 2020

Una de las consecuencias del Covid-19 es el aumento del desempleo, debido a la desaparición temporal, o permanente, de un buen número de actividades económicas. En todo caso, muchas actividades productivas y de servicios van a sufrir profundas modificaciones. Cambios que vienen a sumarse a los producidos por la aplicación de las nuevas tecnologías y la Inteligencia Artificial (IA).

Las estimaciones anteriores a la pandemia hablaban de cerca de 130 millones de personas adultas en Europa que podrían y deberían mejorar su capacitación personal en los próximos años. Un número de personas que se convierten en firmes candidatos para participar en programas de aprendizaje que combinen la Formación Profesional con la realización de prácticas en las empresas.

En el conjunto de la Unión Europea la edad media de las personas que se incorporan a programas de aprendizaje y prácticas es muy variada. Desde aquellos que, como en el caso de Austria, o Alemania acceden tempranamente a este tipo de formación, en el inicio de la edad laboral, como aquellos otros países (tipo Dinamarca, o Finlandia, donde esa edad se sitúa por encima de los 20 años, incluso después de haber realizado otros procesos formativos previos. Lee el resto de esta entrada »


Salir de la crisis

agosto 29, 2020

Hay quienes antes de la llegada de la pandemia anunciaban un recrudecimiento de la crisis económica de 2008 porque aquella famosa crisis, desencadenada tras la caída de Lehman Brothers, en realidad nunca terminamos de superarla. Unas veces con recuperación económica y otras con recesión, lo cierto es que sus consecuencias de precariedad de las vidas y los empleos habían pasado a formar parte de lo cotidiano.

La pandemia del coronavirus ha venido a sembrar aún más incertidumbre en el desorden global instaurado a lo largo de las últimas décadas, demostrando la debilidad de un sistema que colapsa ante el embate de un virus desconocido, evolucionado, mutante, e imprevisible.

Basta recordar que nos dijeron que no eran necesarias mascarillas y resulta que lo eran, o que con el verano y sus rigores las proteínas del virus se debilitaban y la pandemia se diluiría hasta la temporada otoño-invierno y tampoco resultó ser cierto. Las reglas de siempre parece que han dejado de ser válidas. Lee el resto de esta entrada »


Okupas en pandemia

agosto 29, 2020

La pandemia ha producido muchas muertes, mucha enfermedad y muchos daños colaterales, a veces provocados por fuego amigo, el de aquellos que quieren echarte una mano, salvarte de morir ahogado y, en su empeño, te hunden la cabeza una y otra vez hasta que terminas en el fondo del pantano.

Uno de esos daños colaterales consiste en la aparición de muchas nuevas oportunidades aprovechadas de inmediato por los avispados que saben jugar con la ley, con sus fisuras, con la vida, con la muerte, con las necesidades propias y ajenas. Y una de esas necesidades, siempre urgente e imperiosa, es la de la vivienda.

Vivimos en un país cuya Constitución establece,

-Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada.

Pero no queda ahí la cosa porque, a continuación, el pacto constitucional del denostado régimen del 78 aclara quién tiene la obligación de que esto sea así,

-Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas  pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación. Lee el resto de esta entrada »


Rastro y coronavirus

agosto 29, 2020

Los tenderetes repletos de variadas mercaderías han sido sustituidos por pancartas, los vendedores ambulantes son los mismos, pero se desempeñan como manifestantes. Es domingo y el Rastro de Madrid sigue sin haber entrado en la nueva normalidad.

Acaban de prohibir el ocio nocturno, las discotecas y los bares de copas por toda España, después de que durante un  tiempo nada despreciable los hubieran dejado entrar en la normalidad de mascarillas y gel hidroalcohólico, hasta comprobar que, con dos copas de más, hay quien desbarra y contamina a placer.

Los mercadillos con relativos aforos limitados funcionan en barrios y pueblos. Pero el Rastro, el rastrillo tradicional con más de 300 años de existencia, que ha vivido revueltas populares, guerras, invasiones y pandemias (nuestros grandes clásicos del Siglo de Oro ya hablan de este espacio de venta de mercadería diversa) sigue en confinamiento.

No tiene explicación que el Rastro siga cerrado a cal y canto, cuando las grandes superficies comerciales permanecen abiertas. Sólo desde una visión mezquina, marginal y marginadora cabe creer que el Rastro es prescindible porque es un mero atractivo turístico y no hay turistas en Madrid. Lee el resto de esta entrada »


Sanidad, el poder de lo público

agosto 29, 2020

Recuerdo que durante un tiempo, meses tal vez, nos asomábamos a las ventanas

(recuerdo también que vivíamos encerrados, confinados decían, porque una pandemia recorría el país, el mundo entero, a la manera en la que lo hacían el cólera, la viruela, el sarampión, en tiempos lejanos)

y aplaudíamos, un buen rato aplaudíamos, a quienes estaban combatiendo en primera línea en los hospitales, en los centros de salud, en los supermercados, las residencias de personas mayores, la atención domiciliaria, la seguridad ciudadana.

Como la crisis económica del 2008 de la que veníamos, la pandemia que ha llegado lo ha hecho para quedarse. La fueron profetizando sus predecesores, el AIDS, el SARS, MERS, ébola, zika y ese montón de gripes aviares, porcinas, o simplemente A. No se ha ido, el COVID19 sigue haciendo de las suyas, enfermando a personas, matando a personas, no sabemos hasta dónde, no sabemos hasta cuándo.

Salíamos a aplaudir varios minutos cada día, durante todo el confinamiento, hasta que comenzó aquello de la fases

(algunos intentaron apagar los aplausos a base de caceroladas, sin demasiado éxito y con riesgos para la salud cuando aquellas cacerolas sonaban sin distancia de seguridad, ni mascarilla y con cucharas mal lavadas) Lee el resto de esta entrada »


Casaldáliga, un emérito en Brasil

agosto 14, 2020

Eran aquellos años en los que el dictador se iba muriendo y la dictadura pugnaba por seguir viviendo. La editorial Desclée de Brouwer fue publicando entre ambos mundos, el que se estaba muriendo y el que aún no había nacido, una colección de libros bajo el título El credo que ha dado sentido a mi vida.

Yo no había cumplido los 20 años. No los leí todos, pero los que leí eran libros escritos por personas a las que yo tenía como referencias personales. No los elegí, me los propusieron como modelo. José María de Llanos había escrito un libro llamado Creo… publicado en 1971.

Otro de los que leí estaba escrito por otro jesuita, uno que se había ido a vivir con el padre Llanos al Pozo del Tío Raimundo,

-Yo creo en la esperanza,

se llamaba el libro y otro,

-Yo creo en la justicia,

de un consiliario de la HOAC por Alemania y Holanda, llamado Javier Domínguez.

De Pedro Casaldáliga, en esa misma colección recuerdo haber leído,

-Yo creo en la justicia y en la esperanza.

Se ve que este claretiano compartía a pies juntillas con los jesuitas, con los curas obreros y los teólogos de la liberación estos conceptos de justicia, esperanza, que completaban la declaración de intenciones del primer libro de la colección,

-¡Ay de mí, si no evangelizare!,

a cargo de José María González Ruiz. Lee el resto de esta entrada »


El rey debe morir

agosto 14, 2020

En este extraño verano marcado por los repuntes del coronavirus también nos enfrentamos a extrañas serpientes de verano, inevitables en las tertulias de los medios de comunicación y en los noticiarios de cada día. Puede que la falta de noticias veraniegas determinase en años anteriores el surgimiento de estas serpientes, pero me da la impresión de que es el exceso de malas noticias lo que hace necesario ahora dedicar tiempo a eméritas serpientes veraniegas.

Mary Renault viene a ser a la novela histórica lo que Ágatha Christie al género policiaco. Publicó, allá por el año 1958, un precioso libro, El rey debe morir, para entregarnos su versión del mito de Teseo, el recorrido de un niño desde su infancia hasta la construcción del nuevo poder ateniense, pasando por su victoria sobre el Minotauro en Creta, o su voluntad para impedir ser sacrificado, como lo eran cada año todos los reyes de Eleusis.

En el libro, de la mano de Mary Renault, encontramos todos los amores desencadenados, las ambiciones diseminadas, los designios amenazadores, las batallas desatadas, la sangre derramada, que han caracterizado desde siempre al género humano. Lo que ayer fue, vuelve a ser hoy y volverá por sus fueros mañana, para lo bueno y para todo lo malo. Lee el resto de esta entrada »


Los colapsos y la extinción

agosto 14, 2020

Siempre damos nombre y fecha de nacimiento a cualquier acontecimiento que desborda nuestro entendimiento, nuestra capacidad de comprender. Lo hacemos constantemente, desde la crisis del 98 en España, la Revolución de Octubre en Rusia, o la francesa en París, el 2 de Mayo en Madrid, el día de la independencia en casi todos los países del mundo, el Día D, o el 18 de julio .

Claro que hay fechas que recordar y nombres útiles para alimentar la memoria, pero eso no puede hacernos olvidar que esas fechas señaladas evocan procesos de transformación profundos que cambiaron el mundo, nuestro mundo. Incluso las grandes extinciones masivas de especies que se han producido en el planeta (parece que fueron cinco antes de esta sexta que algunos dicen que ya estamos viviendo), tuvieron diversas causas que desarrollaron mucho más allá de una fecha.

En unos casos se trataría de periodos glaciares muy intensos en muy poco tiempo, en otros el aumento o la disminución de los niveles de oxígeno en los océanos, el exceso de vegetación, el impacto de un meteorito, el desbordamiento de la actividad volcánica, volúmenes brutales de dióxido de carbono, calentamiento global, tsunamis. Cada día descubrimos una nueva pista que echa por tierra anteriores elucubraciones. Lee el resto de esta entrada »